Algunos partidarios de legalizar la marihuana en Nueva Zelanda, han desafiado a las autoridades con la colocación de una máquina dispensadora de cannabis en un club de Auckland a un precio similar al del mercado negro.
El aparato es parecido a las máquinas que venden "hierba" con fines terapéuticos en California y donde el precio de un gramo de marihuana asciende a los 20 dólares neozelandeses (unos 12,3 euros).